Antes de entrar a ésta reserva natural, hay un restaurante/bocatería en el que puedes proveerte de agua para el camino (son 2h de caminata; 1h para ir y otra para volver).
Nosotras llegamos a las 17.00 de la tarde, por lo que cogimos un bocata ya que no habíamos comido. Tras proveernos de comida y agua, compramos las entradas (6€/adulto; 4€/niño) y por fin ya estábamos dentro.
Nada más entrar, te encuentras con un precioso lago de color verde en el que (cuando el tiempo acompaña) te puedes bañar. Además también hay mesas en caso de querer hacer picnic.
Nosotras fuimos un día en el que hacía calor, pero aun así el agua estaba helada; así que eso se lo dejamos a lxs más atrevidxs.